Román Reyes (Dir): Diccionario Crítico de Ciencias Sociales

Valores  
 
Alicia Garrido Luque
Universidad Complutense de Madrid

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El concepto de valor es central en ciencias sociales. Thomas y Znaniecki en su estudio sobre el campesinado polaco (1918) señalaban como el objetivo principal de la teoría social, así como de su investigación, el análisis de las actitudes y los valores. Ambos científicos sociales (Thomas y Znaniecki, 1918, p.22) indicaban que las actitudes son "un proceso de la conciencia individual que determina la actividad real o posible del individuo en el mundo social", mientras que los valores son "cualquier dato con un contenido empírico accesible a los miembros de un grupo social y con un significado en relación al cual éste es o puede ser un objeto de actividad". Los valores tienen para ambos autores una importancia clave en el estudio de las actitudes que diferencian a distintos grupos sociales. Todo fenómeno social es, en consecuencia, en parte individual y en parte social. La importancia dada a los valores es común a otras teorías sociológicas como el estructural-funcionalismo de Talcott Parsons. Para este sociólogo, la estructura y el sistema de estratificación de una sociedad vienen determinados por el consenso o aceptación de un sistema común de valores. Estos sistemas de valores diferencian a unas sociedades de otras (Parsons, 1951). Esta visión de los valores como elementos diferenciadores de distintos grupos sociales es generalmente compartida por sociólogos y psicólogos, siendo uno de los pilares de numerosos estudios transculturales sobre las diferencias en valores entre distintas sociedades. Algunos autores como Schwartz y Bilsky (1987, 1990) han elaborado un modelo teórico para el estudio de los valores personales, sosteniendo que éstos tienen una estructura universal. En el modelo expuesto por Schwartz se definen diez tipos básicos de valores como son: universalismo, benevolencia, tradición conformidad, seguridad, poder, logro, hedonismo, estimulación y autodirección. Este modelo ha sido contrastado en diferentes países con culturas diferentes y ha sido aplicado al estudio de diversos aspectos de la realidad social (véase Ros y Grad, 1991; Grad, Ros, Alvaro y Torregrosa, 1993 o Ros, Grad, Alvaro y Garrido Luque, 1993). Otros científicos sociales proponen establecer las diferencias entre sociedades en función de valores materialistas y postmaterialistas (Inglehart, 1991). La tesis de este sociólogo es que a medida que una sociedad consigue un mayor bienestar económico se produce un cambio de valores materialistas, centrados en la satisfacción de necesidades materiales, en favor de valores postmaterialistas centrados en la satisfacción de necesidades de autorrealización. Las tesis de Inglehart sobre el cambio en las orientaciones de valor han dado lugar a numerosos estudios empíricos en diferentes contextos culturales y países con diferencias en desarrollo económico (véase Díez Nicolás, 1994). En España, los estudios más recientes (Orizo, 1991) destacan que se está dando una evolución hacia valores mixtos (combinación de valores materialistas y postmaterialistas) y valores postmaterialistas.

A pesar de su frecuente utilización en la investigación en ciencias sociales el término valor tiene múltiples acepciones. Esta situación representa un serio problema para poder establecer un conjunto de conceptos con un significado compartido con el que poder expresar la relación entre el conocimiento sociológico o psicológico y la realidad social a la que dicho conocimiento se refiere. Al igual que otros conceptos interdisciplinares como los de representación social, actitud, creencia, etc. el concepto de valor está ubicado en un terreno conceptual indiferenciado con relación a conceptos afines como los que acaban de ser señalados. Pese a los intentos de clarificación y diferenciación como el de Rokeach (1973) para quien los valores son creencias personales consistentes y duraderas de carácter evaluativo, lo cierto es que la ambigüedad definicional sigue caracterizando el uso del término valor. Al carácter evaluativo de los valores enfatizado por Rokeach, habría que añadirle su carácter motivacional destacado por psicólogos sociales como Allport (1935) para quien son los valores personales los que guían las acciones de los individuos. Al mismo tiempo, los valores son, también una forma de acción (véase Phillips y Fogarty, 1986).
 

Cuadro 1

Características usadas para definir conceptos cognoscitivos

Características Pro- Ca- As- As- Ca- Ca- Rela- Ca- Ca- Cate- Res- Rela- Ca- Parte Ca-

ceso rác- pecto pecto rác- rác- tiva rác- rác- gori- pues- ción rác- de la rác-

men- ter cog- emo- ter- ter- men- ter ter za- ta con ter es- ter

tal moti- nos- tivo o apren- diná- te es- orga- espe- ción ver- la abs- truc- com-

me- vador citivo eva- dido mico table niza- cífico bali- per- trac- tura plejo

dia- de la luati- tivo zada cep- to de

dor ac- vo ob- ción per-

IV ción ser- sona-

vable lidad

Conceptos

Actitud X X X X X X X

Creencia X X X X X

Valor X X X X X X X X

Opinión X X X X X

Estereotipo X X X X X X X X

Representación

social X X X X X X X X X X

Imagen X X X X X

Prejuicio X X X X X X

Fuente: Maritza Montero, 1994, p.120.
 

Autores como Montero (1994, p. 115) tras realizar una revisión de las diferentes definiciones del concepto valor señala que un valor "es un elemento o proceso mediador que relaciona las evaluaciones (componente afectivo) con la cognición (componente cognoscitivo) y produce alguna forma de comportamiento (elemento conativo), pero además, como una persona puede tener muchos valores, que están ligados a la cultura, estos se organizan en sistemas". Esta psicóloga social presenta un cuadro que ilustra las similitudes y diferencias con respecto a conceptos afines en diferentes dimensiones (véase Cuadro 1).

Además de las dimensiones antes señaladas, los valores tienen una intensidad -importancia atribuida a un valor o conjunto de valores- y una dirección -evaluación positiva o negativa-y se corresponden con algún tipo de norma, bien ideológica o bien moral o ética (véase Hofstede, 1984).

Junto a esta ambigüedad definicional a la que se acaba de hacer referencia, también encontramos numerosos problemas en la medición de los valores. Estos problemas metodológicos se derivan principalmente de las múltiples formas de operacionalización de los valores (véase Phillips y Fogarty, 1986), así como de la no distinción entre valores que se refieren a lo que es deseado y valores referidos a lo que sería deseable. Mientras que la operacionalización o medición de los valores representa un problema a la hora de establecer diferencias entre los diversos valores que caracterizan a distintas sociedades, la no separación entre lo que las personas desean y lo que piensan que debería ser deseado contribuye a que muchos estudios psicológicos y sociológicos sobre valores realicen un análisis erróneo de sus datos al confundir la realidad con lo que es socialmente deseable (véase Hofstede, 1984).

En conclusión, podemos afirmar que, pese a las ambigüedades conceptuales y metodológicas, la utilización del concepto de valor ha contribuido al desarrollo de diferentes estudios transculturales que permiten analizar las diferencias y similitudes así como la estructura de valores común a diferentes tipos de sociedades y grupos sociales.


BIBLIOGRAFIA

Allport, W. (1935). Attitudes. En M. Fishbein (Comp). Reading in attitude theory and measurement. Nueva York. John Wiley.
(Edición de 1967).
Díez Nicolás, J. e Inglehart, R.(1994). Tendencias mundiales de cambio en los valores sociales y políticos. Madrid. Ed Fundesco.
Grad, H.; Ros, M. Alvaro, J.L. y Torregrosa, J.R. (1993). Influencia de factores universales, culturales y ocupacionales en el sistema personal de valores en España. Interacción Social, 181-199.
Harding, S. y Fogarty, M. (1986). Contrasting values in Western Europe. Unity, diversity and change. Macmillan Press. Londres.
Hofstede, G. (1984).Culture's consequences. International differences in work-related values. Londres. Sage.
Inglehart, R. (1991).El cambio cultural en las sociedades industriales avanzadas. Madrid. CIS y Siglo XXI.
Montero, M. (1994). Indefinición y contradicciones de algunos conceptos básicos en la psicología social. En M. Montero (Comp). Construcción y crítica de la psicología social. Anthropos. Barcelona.
Orizo, F.A. (1991).Los nuevos valores de los españoles. Fundación Santa María-SM. Madrid.
Parsons, T. (1951).El sistema social. Alizanza Editorial. Madrid. (Edición de 1982)
Rokeach, M. (1973).The nature of human values. Nueva York. Free Press.
Ros, M. y Grad, H. (1991). El significado del valor trabajo como relacionado a la experiencia ocupacional: Una comparación de profesores de EGB y estudiantes del CAP. Revista de Psicología social, 6 (2), 181-208.
Ros, M.; Grad, H. Alvaro, J.L. y Garrido Luque, A. (1993). Estructura y significado de los valores en relación a la adscripción política. Madrid. CIS. (Estudio no publicado).
Schwartz, S.H. y Bilsky, W. (1987). Towards a universal psychological structure of human values. Journal of Personality and Social Psychology, 5, 550-562.
Schwartz, S.H. y Bilsky, W. (1990). Towards a theory of the universal content and structure of values: Extensions and cross-cultural replications. Journal of Personality and Social Psychology, 58, 878-891.
Thomas, W.I.y Znaniecki, F. (1918-20). The polish peasant in Europe and America. 5 volúmenes. Boston. Badger.


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